Por: Miluz Tito Carcausto
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) resolvió que el expresidente Martín Vizcarra cumpla la prisión preventiva de cinco meses en el penal de Lurigancho, dejando sin efecto su permanencia en Barbadillo.
La medida responde a presuntas irregularidades en la evaluación de la Junta Técnica de Clasificación, que inicialmente dispuso su reclusión en dicho establecimiento.
Según la resolución, la ficha de clasificación otorgó al exmandatario un puntaje de 10, lo que determinó su traslado a Barbadillo.
Sin embargo, la Directiva N.° 006-2023-INPE-DTP establece que dicho penal no está contemplado como centro de destino para procesados, correspondiéndole legalmente cumplir la medida en Lurigancho.
Ante este panorama, el INPE anunció la conformación de una nueva Junta de Clasificación, integrada por un abogado, una psicóloga y una trabajadora social, que evaluará el futuro penitenciario de Vizcarra.
En tanto, la institución descartó cualquier injerencia política de la presidenta Dina Boluarte en esta decisión y aseguró que primará la seguridad del exjefe de Estado.


