Por: Miluz Tito Carcausto
Lo que debía ser una mañana de alegría y celebración se tiñó de tragedia en el distrito de Yura.
Reiner L. O., un escolar de apenas 12 años, falleci* repentinamente mientras participaba en las actividades por el aniversario del colegio Charlotte, donde cursaba el primer grado de secundaria.
El menor, emocionado por formar parte del pasacalle, se desplomó frente a sus compañeros instantes después de haber salido corriendo para unirse a la comparsa.
Según el testimonio de su madre, Nelly Ortega, Reiner sufrió una caída al salir del colegio, tras resbalar por una rampa. Aunque logró levantarse, al llegar a su grupo perdió el conocimiento y cayó inconsciente.
“Mi hijo era sano, nadie me ayudó. Yo sola conseguí un carro, pero ya no reaccionaba”, declaró entre lágrimas, exigiendo una investigación por la falta de auxilio inmediato.
En tanto, el informe de necropsia reveló que el menor padecía una malformación congénita valvular aórtica, una condición grave del corazón que terminó siendo fatal.