Por: Miluz Tito Carcausto
Era un sábado gélido en Huancayo, cuando un padre de familia decidió ir a comprar cervezas para su negocio, acompañado de su menor hijo de cuatro años, quien viajaría en el asiento trasero de la mototaxi hasta llegar al distrito Daniel Hernández en Tayacaja.
En el trayecto el padre recogió como pasajero a Héctor Ortiz de la Cruz (32). Ya en la mototaxi, Ortiz le dijo al pequeño que se durmiera para así cargarlo. Ese momento fue aprovechado por Ortiz para dar rienda suelta a sus bajos instintos.
Al parecer el ruido del motor ocultaba lo que realmente pasaba a espaldas del conductor. Fueron los gritos de dolor del niño de 4 años que hizo que el padre detenga su mototaxi y verificará que sucedía.
El progenitor no podía creer lo que veía, su engreído estaba con las prendas a la altura de la rodilla. No había duda, su pasajero había abusado de su pequeño. El sujeto quiso escapar, pero el angustiado padre junto a otro chofer lograron atrapar al violador.
Luego de las denuncias, juicios del caso y la sustentación de la fiscal Flor Hermoza de la Fiscalía de Tayacaja, ahora Héctor Ortiz de la Cruz pasará el resto de su vida tras las rejas del penal de Huamancaca, tras ser condenado a cadena perpetua por el delito de violación sexual en agravio de un menor de 4 años.
Las autoridades concluyeron que Ortiz, quien laboraba como conductor de carga pesada, abusó del niño. Al escuchar la sentencia, Ortiz, casi rompe en llanto.
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