Por: Maria T.
Cientos de senderistas quedaron atrapados en las laderas del monte Everest, en el Tíbet, luego de una intensa nevada que cubrió los campamentos a más de 4.900 metros de altura. Equipos de rescate, bomberos y lugareños con yaks trabajan sin descanso para abrir paso entre la nieve y poner a salvo a los excursionistas.
Hasta el momento, más de 350 personas han sido rescatadas y llevadas al municipio de Qudang, pero aún quedan unas 200 varadas en las montañas. Algunos sobrevivientes relataron que el mal tiempo llegó sin aviso, con truenos, vientos fuertes y una capa de nieve de más de un metro que sepultó tiendas y rutas.
Los testimonios recogidos por la BBC y Reuters dan cuenta de escenas de pánico y frío extremo. “He estado en el Himalaya 20 veces, pero nunca vi algo así”, contó un senderista. Muchos excursionistas sufrieron hipotermia, mientras que aldeanos tibetanos subieron la montaña cargando alimentos y medicinas para ayudar.
Las autoridades chinas suspendieron el acceso al área turística del Everest, mientras continúan las labores de rescate. La tormenta coincide con la llamada “Semana Dorada” en China, época en la que miles de turistas viajan por todo el país. El clima extremo también afecta al vecino Nepal, donde las lluvias han dejado más de 40 muertos.


