Por: Maria T.
Sébastien Lecornu, primer ministro de Francia renuncia hoy lunes, apenas 26 días después de asumir el cargo y menos de 24 horas después de presentar su nuevo gabinete. Su dimisión sorprendió al país y refleja la creciente inestabilidad del gobierno del presidente Emmanuel Macron.
Lecornu, que había sido ministro de Defensa y uno de los aliados más cercanos de Macron, afirmó que “no se cumplen las condiciones” para seguir al frente del Ejecutivo. En su discurso, criticó la falta de acuerdos entre los partidos y acusó a la oposición de actuar “como si tuviera mayoría absoluta”.
La renuncia desató una tormenta política: varios partidos exigieron elecciones anticipadas y algunos incluso pidieron la dimisión de Macron. Marine Le Pen, líder de la extrema derecha, declaró que “esta broma ya ha durado demasiado” y aseguró que los franceses “están hartos de la crisis permanente”.
Con esta salida, Francia suma cinco primeros ministros en menos de dos años. El país enfrenta además un serio problema económico, con una deuda del 114% del PIB y un déficit que preocupa a la eurozona. Tras el anuncio, la Bolsa de París cayó bruscamente.


